Exportadores: Si se restringe la energía en los puertos, el impacto sería incuantificable

Los exportadores se muestran preocupados ante el anuncio de que los puertos deben reducir el uso de energía en sus procesos.

El anuncio que hizo este fin de semana la Asociación de Terminales Portuarios Privados del Ecuador (Asotep), sobre que desde el lunes 21 de octubre deben reducir su uso de energía, provoca preocupación en el sector exportador nacional.

Felipe Ribadeneira, presidente del directorio de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), indicó este domingo que si la medida se aplica, el impacto para el sector sería incuantificable.

“Hemos transmitido nuestra preocupación a las autoridades ya que el impacto sería incuantificable”, advirtió Ribadeneira.

En un comunicado, Asotep informó que la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) les notificó que deben reducir el consumo de energía eléctrica a un máximo de 1 megavoltiamperio (MVA). Esta es parte de las estrategias que el Gobierno aplica para enfrentar la crisis energética que atraviesa el país, que sufre cortes de luz desde el pasado 23 de septiembre.

De acuerdo con Asotep, esta restricción implicaría que de los casi 7.000 contenedores que se transfieren semanalmente a las terminales asociadas ubicadas en la isla Trinitaria, en Guayaquil, solo alrededor de 150 podrán mantenerse conectados a los sistemas de refrigeración necesarios.

Por su parte, el titular de Fedexpor, días atrás, ya se había pronunciado acerca de la crisis energética y el impacto en el sector exportador. Aseguró que si bien algunos sectores de exportación continúan mostrando su fortaleza, no se pueden ignorar los retos internos que enfrenta Ecuador, en particular la falta de oferta energética.

Indicó que como federación creen que es fundamental tener información clara y detallada de la magnitud de esta profunda crisis, para que todos los actores que conforman el país sean conscientes de las decisiones que se requieren para superar este desafío. “Los problemas en la generación, transmisión y distribución de energía, que han estado presentes durante años, pero fuera de la discusión, se han vuelto más evidentes ahora que la crisis ha alcanzado un nivel crítico”.

“La crisis energética afecta de manera directa a todos los sectores, particularmente para el sector exportador se reduce la competitividad externa del país frente a otros competidores, que además de contar con la provisión de servicios básicos continuos, cuentan también con una estructura flexible en sus costos que les permite ajustar su estrategia frente a cualquier coyuntura adversa”, sostuvo Ribadeneira.

En este contexto, dijo el dirigente gremial, la Asamblea Nacional tiene una nueva oportunidad para generar un cambio estructural en el sistema eléctrico. Indicó que el proyecto de ley que se está tratando actualmente en el Legislativo abre la puerta para que se amplíen las alternativas de generación energética tanto en términos de fuentes como de organismos ejecutores. Señaló que la diversificación es crucial para garantizar un suministro energético más robusto y eficiente en el mediano y largo plazo.

Por su parte, el sector camaronero, el principal producto de exportación no petrolera y no minera del país, también se pronunció a través de José Antonio Camposano, presidente de la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA). “Preocupante anuncio de los puertos privados. He alertado de esta situación a las autoridades competentes para evitar el impacto a las exportaciones”, dijo.

El camarón es una de las cargas que necesitan mantenerse refrigeradas para llegar a sus puertos de destino en óptimas condiciones. Según las últimas cifras de Fedexpor, de enero a agosto pasado Ecuador exportó $ 4.684 millones en camarón a sus diferentes mercados, siendo China el más importante para este producto.

Fuente: El Universo